Las pymes nacionales activaron la cuenta regresiva con
la mira puesta en las elecciones de octubre y la expectativa en un posible
cambio en la dirección política y económica.
En conferencia de prensa las empresas nucleadas
en la Confederación General Económica de la Argentina (CGERA) lanzaron críticas
a la administración de Cambiemos y se mostraron expectantes en relación con los
movimientos de las fuerzas opositoras, a las que les reprocharon la falta de
convocatorias a discutir un programa a futuro orientado a la recuperación del
mercado interno.
Los principales directivos de la entidad
mantienen una posición distante del oficialismo desde las primeras horas de
gestión a partir de la apertura a las importaciones, que impactaron en el
consumo interno desde el vamos.
Este martes los distintos sectores representados
acusaron un promedio de caída del 30% en las ventas en lo que va del año en el
marco de una retracción del mercado atada a la caída del consumo que también
afecta a la importación, según explicaron.
Después de cuatro años de gobierno, al cambio de
tendencia original se sumó el impacto de las tarifas y de la alta tasa de
interés. El referente de las manufacturas de cuero, Ariel Aguilar, señaló que
solamente en ese sector cerraron más de 100 fábricas, a la par de 35
curtiembres y otras 300 fábricas de zapatos.
El dirigente Aldo Lo Russo, del sector
metalúrgico, señaló que el 43% de las empresas del sector despidió personal en
el marco de una caída sectorial en la que solo se mantienen las proveedoras de
la industria hidrocarburífera, a las que, sin embargo, la esperan meses
complicados en el futuro.
Entre los rasgos más negativos los metalúrgicos
destacaron la crisis del autopartismo atado a la industria automotriz. El
sector, que en condiciones favorables luchaba para ganar espacio en la
fabricación de autos local, se redujo al mercado de reposición, es decir, al de
la venta de autopartes al público.
En sintonía con sus pares, Lo Russo llamó a
discutir “una política industrial con generación de capital, administración del
comercio y planificación de cara al futuro” en un llamado a la oposición que
por estas horas se concentra en las candidaturas para las PASO: “En el gobierno
no hay lugar para las pymes”.
El presidente de la Confederación Económica de
la Provincia de Buenos Aires (CEPBA), Guillermo Siro, consignó que el
cierre de negocios se viene produciendo a un ritmo de hasta 3 empresas por día
sólo en el universo registrado. “No hay mercado ni rentabilidad, salvo en el
ámbito de la economía financiera”, señaló.
A la par, Raúl Zylbersztein, referente de la
industria pyme marroquinera, lamentó que el sector está en boca de muchos pre
candidatos a suceder a la administración de Cambiemos pero en la cabeza de
pocos a la hora de las definiciones. “Faltan trece quincenas para que llegue el
próximo gobierno pero no sabemos cómo vamos a hacer para llegar”, indicó.
Los empresarios pymes advirtieron que la
situación que denuncian desde la llegada de Cambiemos al poder afecta en forma
creciente a los grandes jugadores de la economía. Mencionaron entre otros casos
al de Arcor, la principal de las alimenticias argentinas y una de las más
importantes a nivel proyección mundial.
En ese marco cuestionaron también los planes de
“alivio” que lanzó el gobierno nacional en las últimas semanas, puntualmente el
de los descuentos para la compra de autos y la actualización de los programas
Ahora 12 y Ahora 18 “que en los hechos tienen un efecto reactivador de las
importaciones”.
Libre comercio
En la conferencia de prensa, la dirigencia pyme
hizo un apartado especial para criticar el posible acuerdo de libre
comercio entre el Mercosur y la Unión Europea, que el gobierno procura
finiquitar desde su llegada al poder con la resistencia de amplios sectores de
la producción locales.
El presidente de CGERA, Marcelo Fernández,
señaló que "siempre nos hemos opuesto a este acuerdo porque sabemos que
haría desaparecer a muchos sectores productivos vinculados a nuestra entidad
cómo indumentaria, calzado y marroquinería porque recibiríamos de Europa los
excedentes; ellos están seis meses adelantados y fijan moda".