Con un decreto publicado
en el Boletín Oficial un domingo, el Gobierno anunció la restricción de la
compra de dólares, la obligación de exportadores de liquidar divisas y
la autorización del pago de impuestos con bonos. Esto hizo recordar rápidamente
a lo que sucedió en el segundo mandato de Cristina Kirchner.
Entre 2011 y 2015, el
control de cambio fue una de las medidas más controvertidas de la última
administración kirchnerista, ya que comenzó a implementarse en un momento en el
que la economía empezaba a frenarse y que la escasez de divisas comenzaba
a encerrar al Gobierno en la clásica trampa de la restricción externa.
Además, durante el primer
gobierno de Cristina habían salido del circuito legal 70 mil millones de
dólares, prácticamente la misma cifra que se fue durante estos cuatro años de
macrismo.
Para evitar el drenaje vía
turismo, el Gobierno "perfeccionó" el cepo, colocando un impuesto que
llegó hasta el 35% de lo que se gastaba con tarjeta en el exterior. Sin
embargo, la persona que viajaba podía volver y solicitar que se le devolviera
una parte. No obstante, pagar con un 35% de excedente seguía siendo negocio, ya
que la brecha entre el oficial y el blue era superior.
¿Cuáles son las
similitudes y las diferencias con la medida anunciada ahora por el Gobiero?
En principio, el Gobierno
de Macri asegura que busca no perjudicar al pequeño ahorrista, por lo que
permite comprar hasta 10 mil dólares por mes por persona. Una cifra a la que
muy poca gente puede acceder, si se tiene en cuenta que representa unos 620 mil
pesos.
En este caso, lo que se
busca es realizar un control más estricto sobre las empresas y no tanto sobre
las personas físicas.
Las compañías no podrán
comprar dólares para atesorar y, una de las cuestiones que más ruido pueden
generar, los exportadores tendrán que liquidar las divisas que
obtengan de sus ventas al exterior en el mercado local dentro de un máximo de
cinco días hábiles después del cobro o 180 días después del permiso de embarque
(15 días para las commodities). No hay restricciones para la importación o pago
de deudas a su vencimiento.
Además de los anuncios de
este domingo, el Banco Central había adelantado ayer que los bancos deberán
avisar a la AFIP para realizar giros al exterior. Esta medida aún no afectará,
en este último sentido, a las empresas no financieras.
No obstante, el Banco
Central se ocupó de aclarar que nadie tendrá problemas para sacar los dólares
de sus cuentas, ni las personas físicas ni las jurídicas. También, que no habrá
impedimiento alguno para el comercio exterior y que no habrá restricciones
sobre los viajes al extranjero.