Ingentia prima. Si
bien los paleontólogos lo bautizaron con nombre de mujer, aún no pueden saber a
ciencia cierta si se trata de una hembra. Vivió en las actuales tierras
sanjuaninas hace más de 205 millones de años. “No podemos saber el género
porque no tenemos indicios en los materiales que encontramos”, contó la
paleontóloga Apaldetti. Este hallazgo permitió comprender mejor el desarrollo
hacia el gigantismo, que nunca más volvió a ocurrir en la historia de la vida
en la Tierra.
Un equipo liderado por los
paleontólogos Cecilia Apaldetti y Ricardo Martínez estaba
explorando una zona desértica en el sudeste de la provincia de San Juan en
2015. El técnico Diego Abelín vio unos huesos grandes, y pensó que eran de una
vaca muerta. Pero gritó para hacer una broma: "¡Un
dinosaurio!". Los científicos se acercaron, y no era un chiste. Se
trataba de una especie desconocida de dinosaurio: son los restos de la
llamada "abuela de los dinosaurios gigantes", que habitaron en
el actual territorio de la Argentina.
Apaldetti, que es
investigadora del Conicet en el Instituto y Museo de Ciencias Naturales de
la Universidad Nacional de San Juan, realizó el estudio detallado de los restos
fósiles. "Siempre confío en los hallazgos de Diego, porque generalmente
terminan siendo importantes".
"Le
pusimos un nombre de hembra, porque considero que estamos viviendo un cambio de
paradigma con respecto al lugar de las mujeres en la Argentina y en el
mundo. ¿Por qué no pensar que fue una hembra la
representante de un camino evolutivo desconocido de los vertebrados para ser
gigantes? Por eso, me pareció acertado ponerle un
nombre femenino. Este hallazgo nos permitió comprender mejor el desarrollo
hacia el gigantismo, que nunca más volvió a ocurrir en la historia de la vida
en la Tierra".
También encontraron restos fósiles de otra especie
ya conocida, Lessemsaurus sauropoides, que había sido descubierta
por un pionero de la paleontología José Bonaparte en 1999. Ingentia prima y
Lessemsaurus eran como "primos", y estaban emparentados a su vez con
otra especie que había sido descripta en Sudáfrica en 2003, Antetonitrus
ingenipes. Esto se debe a que las tres especies vivieron en un momento que
América del Sur formaba parte del supercontinente Pangea, que
agrupó a la mayor parte de las tierras del planeta hasta unos doscientos
millones de años atrás. Por las características en común, el equipo de
científico propuso que se trató de una familia desconocida hasta el momento:
"los lessemsáuridos".
El estudio de Ingentia se publicó en la
revista Nature Ecology & Evolution de esta semana, con Apaldetti
como primera autora, y como coautores, los paleontólogos Ricardo Martínez,
Ignacio Cerda (del Museo Ameghino de la Universidad Nacional de Río Negro),
Diego Pol (investigador del Museo Paleontológico Egidio Feruglio de Trelew) y
Oscar Alcober.